El trabajo en primera persona
Si trabajo como trabaja un buen trabajador seguramente lograré hacer un buen trabajo. La empresa para la que trabaje estará satisfecha. También mi jefe. Acaso también mis compañeros, mis familiares, mis amigos. También estará satisfecho mi instinto de supervivencia, mi instinto gregario, mi necesidad social, mi necesidad de estima. Pero ¿Y yo? ¿Mi individualidad? ¿Mi autorrealización? ¿Mi ser? ¿Quedará satisfecho?
No siempre.
Sé que respetar mi propio ser a la hora de trabajar es muy difícil… Pero también sé que hacerlo puede generar resultados que jamás, ni yo, ni mi empresa, ni mi jefe, ni el mundo entero, hubiera imaginado.
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